martes, 30 de octubre de 2007

los ñoquis del 29

Ayer era 29 y me invitaron a mis primeros ñoquis del 29. La tradición en Argentina y Uruguay (y seguramente en algún sitio más) señala que hay que comer ñoquis todos los meses al llegar este día. Y si mientras se comen se ha dejado dinero bajo el plato, el mes siguiente será generoso en ingresos. Así que parece que ayer era un día propicio para los conjuros. Espero que se cumplan (y que no se limiten sólo a lo financiero).


Cuenta la leyenda (cristiana) que el origen de la celebración estaría en un médico turco convertido al cristianismo -que luego sería San Pantaleón-, que en su peregrinación por tierras venecianas fue invitado un día 29 a compartir la humilde mesa de unos campesinos, lo que agradeció prometiendo buenas cosechas y generosa pesca para el año siguiente. También podría haber un origen religioso en la celebración de San Pedro y San Pablo el 29 de junio.

La versión laica atribuye los ñoquis al conocido dicho de que el hambre agudiza el ingenio. A finales del XVII, ante la amenaza de una mala cosecha de trigo en el Piamonte italiano, decideron recurrir a las patatas, que hasta entonces sólo se daban de comer a los animales. Y se inventaron los ñoquis. A partir de entonces celebraron mensualmente con esta comida la cosecha de patatas que les había librado de la hambruna.

Sea como fuere, algunos siglos después los emigrantes italianos llevarían la tradición a Sudamérica. Y así hasta hoy (no falta quien cree que todo es una invención interesada de los restaurantes de pasta). Si habrá cuajado la tradición que en Argentina llaman ñoquis a los funcionarios que sólo aparecen por el puesto de trabajo a final de mes para recoger la paga.

La tradición podría estar ahora en peligro por el aumento en el precio de las patatas (o papas), algo similar a lo que sucedió con el maíz en México, que encareció un alimento tan básico como las tortillas.

6 comentarios:

RMS dijo...

Uh! de ver los ñoquis me dieron ganas... mañana mismo busco algo de ellos para saciar mi antojo.
Beso y abrazo!

38 grados dijo...

Oye, ¿y si dejas más mucho mucho dinero bajo el plato, el mes siguiente será muy muy muy generoso de ingresos?. Valdría la pena probarlo, total para que los tenga el banco y no nos den un duro por ellos...jajajaja...por cierto esos ñoquis de la foto me estaban diciendo cómeme...
un beso

tentetieso dijo...

¡Qué aprovechen, rammses, aunque si quieres aprovechar el conjuro tendrás que esperar al próximo 29!

No sé si la fortuna llega en proporción a lo que uno pone bajo el plato, pero parece que no. Ya había pensado en eso, 38 grados, y por eso quería poner 50€ (los billetes de 100€ creo que los he visto alguna vez, los de 500€ dicen que existen...), pero me dijeron que no hacía falta. Ya he dicho que soy novato en esto; será cuestión de ir probando.

De todas formas, la mejor fortuna es que te inviten a unos ñoquis (gracias, C.).

Besos afortunados.

caracolquiscol dijo...

Buenísimo el significado del término en argentina :)
la fortuna será ser invitado a ñoquis, pero si funciona el conjuro nos lo cuentas!

RMS dijo...

Tentetieso, al final comí los ñoquis porque me provocó. De todas maneras he apuntado en la agenda el próximo 29 para no olvidar el conjuro estas cosas me gusta hacerlas.
Saludos.

tentetieso dijo...

Me divierten estos ritos pero soy un escéptico redomado, caracolquiscol. Además, pienso que si funcionaran ya nos habríamos enterado, que hace muchos días 29 de muchos meses de muchos años que buena parte de los uruguayos y argentinos invocan a la suerte. Y no se sabe de nadie a quien le haya funcionado, más allá de para mantener la ilusión unos días. A ver si a rammses, que parece algo menos descreído, le funciona...