Bendita sea
la compañía de los solitarios.
Y bendita sea su amistad.
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Vías cruzadas. Thomas McCarthy, 2004.
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Llorad, llorad, valientes. Un texto de Irene Vallejo.
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*El duelo hay que edificarlo sin prisa, con ritmos arquitectónicos*. Más y
más, mes a mes. No es una enfermedad de la que curarse lo antes posible,
sino ...
Hace 23 horas
1 comentario:
¡Amén!
¿Qué sería de los solitarios sin la presencia de otros solitarios que nos entiendan?
Besos mágicos y púrpuras
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