Mirémoslo desde otro lado:
a veces hace falta sentarse en la orilla
a reponer fuerzas
y a constatar que la corriente seguirá bajando
con su energía incombustible
para cuando queramos -o quiera- zambullirnos.
(las miradas ajenas
-la de Arthur, la de rammses, la de 38 grados-
ayudan a construir esta otra perspectiva...)
Llorad, llorad, valientes. Un texto de Irene Vallejo.
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*El duelo hay que edificarlo sin prisa, con ritmos arquitectónicos*. Más y
más, mes a mes. No es una enfermedad de la que curarse lo antes posible,
sino ...
Hace 3 semanas
2 comentarios:
cuando no sentimos perdidos, ...encallados..., a veces es suficiente con mirar las cosas desde otro punto de vista. bonito díptico.
un abrazo.
¡Lo completaste!.
Es una buena simbiosis. Un buen intercambio...
Gracias por ponerme en perspectiva.
Un abrazo con afecto.
PD: La pela la SOLEDAD, ¡MORTAL!.
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